Germinación en Hidroponía
La fase inicial de formación de mudas también llamada de maternidad es generalmente hecha en un local separado y normalmente ocupando poco espacio. Las mudas pueden ser formadas en varios sustratos como espuma fenólica, vermiculita, lana de roca, fibra de coco, perlite, etc. y los nuevos sustratos se crean todos los días. Cada uno de ellos tiene sus ventajas y desventajas. Recomendamos actualmente la espuma fenólica por ser más práctica e higiénica, esta da un buen apoyo para la muda pequeña y ser altamente porosa, lo que propicia el mantenimiento ideal de la humedad en las raíces.
La espuma fenólica, se adquiere en placas con 345 células, siendo cada célula utilizada para la formación de una muda. El procedimiento es el siguiente:
- Colocar en una bandeja o similar y lavar la espuma abundantemente con agua corriente para retirar todos los residuos de fabricación;
- Hacer un agujero en cada célula y colocar una semilla (o más, dependiendo del cultivo) hasta más o menos la mitad de la altura de la espuma. De preferencia a las semillas peletizadas pues son más fáciles de manejar;
- Haga un agujero con un lápiz, clavo, o mejor aún, compre una jeringa desechable de 2ml y corte la punta metálica de forma que quede sólo 1 cm de la aguja;
- Haga un agujero en el centro del cuadrado hasta más o menos la mitad de la altura de la espuma (con la jeringa, hasta que quede debajo y coloque la semilla, apretando un poco hasta que se apoye en el fondo del agujero);
- Dejar la placa en un lugar con sombra y mantener la espuma húmeda con agua pura hasta la aparición de las primeras hojas (aproximadamente 48 horas), utilizando un spray manual. Una vez mojada la espuma, nunca deje de mantenerla húmeda, pues si llega a secar no reabsorbe el agua;
- Cuando inicie la germinación, retirar de la sombra y colocar al sol. En épocas de intensa insolación, hacer una pequeña protección con pantalla a la hora más caliente del día. Cuidado para que no falte el sol. La planta con poco sol, se estira buscando el sol. Se llama efecto fototrópico. Continuar manteniendo la espuma húmeda sólo con agua pura para evitar la aparición de algas.
Después de la aparición de la segunda hoja, lo que deberá ocurrir de 7 a 10 días, la muda puede ser trasladada al cuarto de niños o pre-crecimiento. No dejamos más tiempo, pues a partir de ahí la planta ha agotado sus reservas y va a necesitar de nutrición.
Cuna o pre-crecimiento
La fase de cuarto de niños o pre-crecimiento se hace en los perfiles hidropónicos pequeños de 58mm de ancho. En esta fase la planta pasa a recibir la solución nutritiva. Aunque en la literatura, hoy en día los productores utilizan la misma solución nutritiva utilizada en la fase de crecimiento final, sin que esto provoque diferencia en el resultado final.
Para el caso de la lechuga las plantas quedarán en el cuarto de niños cerca de 3 semanas o hasta que las hojas empiecen a estar próximas. Esto significa que las raíces también se están cerca. Como las plantas ya no tienen más espacio para crecer se hace la traslación a los perfiles mayores para que se complete el crecimiento. Por eso es altamente eficiente tener las encimeras de cuarto de niños al lado de las bancadas de crecimiento final, para agilizar el trabajo y no tener que desplazarse entre invernaderos para cargar las plantas.
Es también en la fase de cuarto de niños que se hace el control de calidad, pues las plantas que no se desarrollaron bien, no vale la pena que continúen el crecimiento. En virtud de esto, el cuarto de niños es normalmente dimensionado con un número de agujeros mayor que en el crecimiento final. Es en el cuarto de niños que las plantas pueden quedar más agrupadas lo que resulta en un mejor aprovechamiento del espacio.
Crecimiento final
En el caso de que las plantas se queden en el perfil de crecimiento final hasta alcanzar el punto de cosecha. Esto normalmente tomará alrededor de tres semanas en el caso de lechuga. Otras variedades y tipos de plantas tienen ciclos diferentes que deben ser conocidos y acompañados de acuerdo.
El punto de cosecha variará de acuerdo con lo que el mercado local está acostumbrado, pues en el caso de la lechuga, por ejemplo, dependiendo del tiempo en que ella permanece en producción su peso puede variar entre 250g a 400g por pie. Hay que considerar lo que esto significa en términos de tiempo de producción, pues a lo largo del año puede significar una o dos cosechas más o menos.
De la misma forma, se deben conocer las peculiaridades de cada planta en lo que se refiere a necesidades nutricionales, insolación, etc., para obtener hortalizas de la mejor calidad posible. Recordar que el ciclo se cambia en función de la duración del día, temperatura, etc.
Para la cosecha, en hidroponía se utilizan envases individuales que traen los datos del productor, lo que significa una protección mayor y consecuentemente menor pérdida en la manipulación y principalmente una confianza muy grande por parte del consumidor.
El mejor horario para la cosecha es justo antes del amanecer para ser inmediatamente entregado. O al caer de la noche, siempre en los horarios más frescos.
Buenos cultivos ;)
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